Cargando...

Manillas y Rosetas


Disponemos de una selección muy amplia de manillas para puertas de paso y puertas correderas. Manillas con placa o manillas con roseta en diferentes acabados.
Hemos separado las categorías de las manillas por diferentes gamas.
Tenemos las manillas de gama Premium, las manillas de gama médium y las manillas de gama Básic.
La diferencia de estas gamas, las identificamos por los diferentes precios de las manillas de alta gama a manillas económicas.

Por otro lado, también encontramos manillas clásicas, rústicas, artesanales, forja o forja fragua.
Manillones y asas de diferentes tamaños y acabado, tanto para puertas correderas como para puertas de paso.

Combina con las manillas el pernio para que tengan el mismo acabado o lo más similar a la manilla.
Para saber diferencia entre una Maneta o Manillas y una Roseta, solo tenemos que ver la forma de la placa o parte que va atornillada a la puerta.
Las manetas o manillas, son las placas largas que pueden ser con forma de capilla, ovaladas, cuadradas o diferentes formatos en función al estilo de la manilla.
Las rosetas, son aquellas que no llevan placa, sino una placa normalmente redonda que oscila entre diámetros de 40 a 65 mm. En la actualidad, también podemos encontrar rosetas cuadradas para líneas mucho más modernas y rectilíneas, así como alguna en forma oval, principalmente en líneas clásicas.
No es nada complicado instalar una Maneta o Manillas y una Roseta. Cuando se trata de sustituir un modelo por otro, debemos tener en cuenta la marca que pueda quedar del anterior modelo, por lo que debemos de medir la placa o roseta antigua y buscar un modelo que lo cubra. Con el paso de los años es normal que haya una diferencia de tonos en la madera producida por la luz y decoloración.

Para su instalación debería ser suficiente con un destornillador y en algunos casos una llave allen.

Los pasos serian destornillar el modelo antiguo tanto de la parte interna como de la externa. Cuando estén desmontados, veremos que hay un cuadradillo que atraviesa la puerta y es el que hace accionar la manilla sobre la cerradura. Este, debemos extraerlo, ya que las nuevas manillas traerán el suyo propio. Atención no se nos cierre la puerta, ya que no podremos abrirla si no montamos una manilla.

Una vez desmontado, procedemos a colocar el cuadradillo que lleva el modelo nuevo escogido. Algunos modelos de cuadradillo pueden llevar una ranura o rebaje en unos de los lados. La posición de esta ranura o rebaje debe de coordinar con el lado que lleve el tornillo de fijación que lleve en el cuello de la manilla, que si lo lleva, normalmente es en forma de tornillo allen.
Principalmente este sistema de prisionero de la manilla respecto al cuadradillo se coloca en los modelos de roseta, ya que la fijación en la puerta es más débil que con placa y ese sistema hace un efecto sándwich, tirando una manilla de la otra y dando más robustez a la instalación. Si su modelo lleva este sistema de fijación, es muy recomendable que la instale bien y que apreté bien los tornillos para que el cuadradillo expanda dentro de la manilla. Una vez tenemos clara la posición del cuadradillo, lo pondremos atravesando la puerta y distribuyéndolo por igual, colocaremos la maneta o roseta guiada por el cuadradillo. Atornillamos la placa o roseta y una vez instalados los 2 lados es cuando debemos proceder a apretar el allen de fijación.

Es aconsejable sustituir también ese picaporte o cerradura que va instalado en el canto de la puerta, el cual suele ser bastante económico en la gran mayoría de casos y sufre también el deterioro del tiempo, asegurando así por muy poco más unos resultados óptimos de funcionamiento.
Cuando se trata de sustituir un modelo por otro, debemos tener en cuenta la marca que pueda quedar del anterior modelo, por lo que debemos de medir la placa o roseta antigua y buscar un modelo que lo cubra. Con el paso de los años es normal que haya una diferencia de tonos en la madera producida por la luz y decoloración. Si la puerta permite ser pintada o restaurada, podremos elegir el modelo que más se ajuste a nuestras necesidades estéticas. En el caso que no sea rehabilitación y sustitución, sino que es puerta nueva, es simplemente un tema de estética y estilo en función al entorno. Actualmente hay gran variedad de modelos, diferenciados no solo en estilos, sino en gama de precios y materiales. Para las puertas de baños o puertas con cerradura, no es obligada la instalación de manetas de placa, ya que para los modelos de roseta se puede instalar bocallaves o muletillas según sea necesario.
Como bien se indica, la diferencia es el material, el cual normalmente va asociado a la calidad o durabilidad de la manilla.

Las manetas o rosetas de zamak y aluminio, son la gran mayoría de veces, un producto de gama económica. Sobre todo se aplica en acabados efecto inox o cromado brillo que es donde da mejores resultados por su composición química.

Existe una gama de manillas de aluminio anodizado tubular que van destinadas sobre todo a edificios de alto tráfico y donde se busca una durabilidad elevada. Normalmente son modelos que pierden estética primando la funcionalidad.

La gama de acero inoxidable ofrece diseño, funcionalidad y duración. El acero inoxidable es un material de alta duración y que puede limpiarse incluso con algunos productos, mientras que el resto de materiales no permite ninguna limpieza que no sea con un paño húmedo.

Las manetas de latón, también ofrecen un alto nivel de calidad, aunque la mayoría llevan aplicado barniz, que es lo que normalmente puede presentar deterioro con los años. A diferencia del resto de materiales, este puede restaurarse y es por ello que en productos de alta calidad y de líneas clásicas sea el material más utilizado.
Lo más apropiado en este caso son las manillas de acero inoxidable. El ambiente salino es muy corrosivo, por lo que el resto de materiales puede ofrecer problemas con los baños que llevan aplicados.

El acero inoxidable es un material que puede tener principios de oxidación, pero al no tener ningún baño superficial, nos permite poderlo limpiar incluso con un estropajo de cocina.

También es posible instalar latón o zamak en acabado cromo brillo. Este acabado fija muy bien sobre estos materiales y dan un gran nivel de durabilidad. En este caso, aconsejamos a marcas de reconocido prestigio que den algún tipo de garantía y es muy importante que nos asesoren bien dando a conocer al profesional que nos suministre la proximidad con el mar.

En los casos donde buscamos instalar una maneta o roseta dorada o similar, tenemos que ser conscientes de que es el acabado que más problemas vamos a tener. Por supuesto, a mayor calidad de la manilla, mayor duración del acabado, ya que dispondrá de un mejor barniz y materiales utilizados, pero, aun así, no podremos evitar sufrir los efectos del ambiente salino.

Sin embargo, hay un acabado denominado PVD Titanio que ofrece una calidad superior a los 20 años y nos permite instalarlo sin ningún problema. Este tipo de acabado, solo está disponible en marcas de prestigio, pero es la única opción de garantías que nos asegura que nuestras manetas o rosetas permanezcan igual que el primer día. Si por el contrario no nos importa el estar limpiando el latón como antiguamente se hacía, no tendremos problemas de instalación, aunque nos obliga a tener ese mantenimiento continuado.
Por favor seleccione una lista de deseos